Jaume Figueras, CTO para Empresas en Nokia, España y Portugal nos explica los usuales errores que cometemos todos al pensar en redes inalámbricas privadas.
Una red móvil privada sirve a una sola empresa u organización, normalmente, y automatiza sus procesos con aplicaciones como robots autónomos, que hacen que el proceso de producción sea más eficiente, más sostenible y seguro. Al ser inalámbrica, es más flexible que las redes cableadas y puede proporcionar conectividad asequible para sensores, maquinaria, dispositivos e incluso comunicaciones críticas, lo que la convierte en un habilitador fundamental para la Industria 4.0.
Una red privada se adquiere o suscribe como un servicio gestionado e incluye puntos de acceso radio y un servidor de red central. Esto se traduce en que la empresa no depende de las redes móviles públicas, lo que supone una mejora porque las redes privadas pueden configurarse para que sean ultra-fiables y admitan casos de uso empresarial y de misión crítica que requieren un rendimiento predecible.
Para muchas organizaciones, la tecnología inalámbrica privada es algo nuevo, por lo que pueden temer largos procesos de integración u operaciones complejas
Al tratarse de una tecnología desconocida para muchos equipos de TI y Tecnología Operativa (OT) de las empresas, las redes inalámbricas privadas de campus y su funcionamiento siguen generando dudas. Por este motivo, desde Nokia se destacan los cinco principales conceptos erróneos más habituales en el sector.
Error 1: La tecnología inalámbrica privada sustituirá al Wi-Fi
La tecnología inalámbrica privada 4.9G/LTE y 5G sustituirá al Wi-Fi para aplicaciones industriales que requieren un gran ancho de banda y/o baja latencia.
El Wi-Fi no va a desaparecer, ya que muchas partes del proceso de TI y OT funcionan con este tipo de tecnología. Disponer de la combinación de tecnologías adecuada para las aplicaciones correctas es vital para digitalizar el proceso OT. Cuando la conectividad básica para procesos no críticos para el negocio sea suficiente, el Wi-Fi seguirá desempeñando un papel vital.
Error 2: Hay muy pocos dispositivos 5G disponibles, por lo que invertir en redes inalámbricas privadas carece de sentido por ahora
La consultora Omdia llevó a cabo un estudio en el que, de las empresas entrevistadas, el 31 % afirmó que la falta de dispositivos y de ecosistema industrial para 5G es el principal problema. Si bien es cierto que muchos proveedores de dispositivos aún no disponen de grandes carteras de dispositivos 5G, la expectación en torno al 5G ha supuesto un verdadero impulso para estar preparados para este mercado y los proveedores de dispositivos se apresuran a conseguirlo.
Y lo que es más importante, la tecnología inalámbrica privada es mucho más que 5G. En cuanto a 4.9G/LTE, existe un ecosistema industrial muy desarrollado con más de 6.800 dispositivos no telefónicos compatibles con LTE. Muchos sistemas industriales incorporan módems 4.9G/LTE. Hasta el 85 % de los casos de uso industrial ya pueden ser soportados por 4.9G/LTE, por lo que no hay necesidad de retrasar las inversiones inalámbricas privadas.
Error 3: El Edge sustituirá a la nube central
La nube en el borde de la red (Edge) es una plataforma de computación de contenedores en las instalaciones que está estrechamente integrada con una red de alto rendimiento para apoyar las aplicaciones utilizadas para los procesos operativos. Mientras que en el espacio de TI la nube desempeña un papel importante, para la tecnología operativa la nube Edge industrial ayuda a satisfacer las capacidades de baja latencia necesarias para los casos de uso de digitalización avanzada, como los robots que necesitan reaccionar en milisegundos, porque los datos se pueden procesar cerca de la planta de fabricación. Esto reduce los retrasos de ida y vuelta que introduciría el procesamiento en una nube central. Los robots que se mueven rápidamente pueden necesitar ser detenidos inmediatamente, por ejemplo, y este tipo de requisitos de baja latencia no pueden mantenerse con una nube a cientos de kilómetros de distancia.
A pesar de la importancia del Edge en las aplicaciones industriales, las nubes central y Edge forman un continuo con diferentes aplicaciones y cargas de trabajo que se ejecutan en diferentes ubicaciones. Algunos datos deben almacenarse de forma centralizada con fines de auditoría. Las aplicaciones de aprendizaje automático a menudo necesitan analizar grandes cantidades de datos históricos, lo que se hace en la nube central, aunque el algoritmo resultante podría aplicarse en el Edge. Por ejemplo, los datos de navegación en tiempo real de un robot móvil autónomo que entrega suministros a la línea de producción se procesan localmente para un control en milisegundos y casi en tiempo real, pero los datos de rendimiento pueden almacenarse de forma centralizada para futuros análisis de los beneficios empresariales del robot.