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Módulo WiFi Plug and Play

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Módulo WiFi Plug and PlaySilicon Laboratories ha presentado el módulo WiFi Plug and Play WGM110 dirigido a las aplicaciones de la Internet de las Cosas (IoT por sus siglas en inglés).

Para facilitar su instalación, este módulo es plug&play, es decir, no necesita de configuración a priori o de instalación de drivers para ser reconocido y poder empezar a trabajar.

Proporciona un rendimiento de radiofrecuencia equilibrado, no provoca una gran huella al tener unas dimensiones contenidas de 14,4x21x2 mm (estimado por la fabricante en un 40% más pequeño que la competencia), y permite acelerar el tiempo hasta llegar al mercado de los desarrollos en los cuales es utilizado.

Este nuevo módulo WiFi Plug and Play ntegra una radio 802.11b/g/n que opera en la frecuencia estándar de los 2,4 GHz, de alto rendimiento, con antena integrada, certificaciones globales, un microcontrolador (MCU) Gecko EFM32 de bajo consumo basado en un núcleo ARM Cortex-M3 funcionando a 48 MHz, una pila Wi-Fi embebida, así como múltiples protocolos de uso habitual en Internet como el TCP, UDP y seguridad por TLS.

La sensibilidad del receptor es de -98 dBm, con +16 dBm de potencia de transmisión. Gracias a ello, podemos conectarnos a largas distancias, de entre 300 y 500 metros de forma típica.

También disponemos de amplias opciones de integración de periféricos, como UART, I2C, SPI y USB. La API de software es compatible con el módulo WF121 de Silicon Labs existente, para facilitar la migración de este al nuevo. El SDK wireless SLWSTK6120A permite a los desarrolladores ser productivos en cuestión de minutos.

Aplicaciones en el módulo WiFi Plug and Play

Los usos habituales de este módulo Wi-Fi son en los sistemas de comunicaciones de máquina a máquina (M2M, por su acrónimo inglés), para sistemas industriales, sensores inalámbricos, controles remotos, termostatos, productos para el hogar conectado (domótica), infotainment (información y entretenimiento) para el coche conectado, dispositivos punto-de-venta, o equipamiento médico y deportivo, por ejemplo.

Gracias a que el protocolo Wi-Fi es el más utilizado no solamente en los dispositivos de la IoT, si no también en ordenadores portátiles, smartphones, tablets, y otros dispositivos, este tipo de conectividad es ideal para conectividad de dispositivo-a-dispositivo, o de dispositivo-a-la-nube.

Con ello, y con su uso, es posible la agregación de datos o la provisión de dispositivos de la IoT sin tener que requerir de una infraestructura de red compleja o de hubs dedicados.

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