Sabrina Bochen, directora de planificación y marketing de productos de u-blox, nos explica las nuevas especificaciones de capacidad reducida (RedCap) para el deseado despliegue 5G.
Puede que aún no esté cumpliendo con las expectativas creadas por su entusiasmo previo al lanzamiento, pero la mayoría de los expertos del sector coinciden en que 5G se encuentra firmemente en la fase de «evolución silenciosa» del ciclo de expectativas de Gartner.
Como sucede con cualquier migración tecnológica importante, el despliegue de 5G debe superar varias complicaciones y existen varias barreras que han ralentizado la adopción de 5G más allá de las aplicaciones orientadas al consumidor.
Barreras para su implantación
Varios factores son responsables del ritmo más lento de lo previsto del despliegue 5G.
Muchos operadores se enfrentan a desafíos de monetización, ya que luchan por equilibrar la necesidad de financiar inversiones en infraestructura 5G frente a los ingresos incrementales de los nuevos servicios. La decisión de la mayoría de los operadores de lanzar servicios en redes 5G no autónomas (NSA) puede haber minimizado las inversiones iniciales, pero todavía falta una propuesta de valor sólida que ha limitado los ingresos incrementales.
Sin una mayor inversión en redes autónomas (SA), mmWave y otras tecnologías avanzadas de 5G, los operadores tendrán dificultades para explotar todas las capacidades de 5G.
Estos beneficios incluyen características como velocidades más altas y servicios innovadores de valor agregado, como la red como servicio y la segmentación de red.
Otros problemas que influyen en la implementación incluyen la inercia en el surgimiento deaplicaciones revolucionarias de sectores como la industria automotriz, donde las preocupaciones legales y la falta de un marco regulatorio han afectado al desarrollo de la conducción autónoma, una perspectiva importante para las capacidades V2X (del vehículo a todo) de 5G.
Sin embargo, uno de los principales factores que afectan la implementación de 5G es el lento crecimiento de las conexiones de IoT. Las previsiones de un crecimiento explosivo en IoT fueron impulsores clave para el desarrollo de 5G, en particular por sus capacidades de comunicación masiva de tipo máquina (mMTC).
Sin embargo, hasta ahora, la mayoría de las aplicaciones de IoT continúan utilizando conectividad LTE y se conectan a redes 4G EPC (núcleo de paquete evolucionado).
Para abordar esta situación y fomentar el desarrollo de un ecosistema IoT 5G, 3GPP ha introducido especificaciones de capacidad reducida (RedCap) para 5G.
Así, en este artículo, la autora analiza cómo RedCap y RedCap ampliado (eRedCap) están preparadas para revitalizar la implementación de 5G.
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